Pastoral Universitaria

La aventura comienza.

Primer Encuentro de Universitarios

Ellos son el grano de mostaza que pronto se convertirán en un árbol frondoso.

Promoviendo la Pastoral Universitaria

El encuentro en San Pedro La Laguna fue una buena experiencia.

Análisis y diálogo

El diálogo y el análisis es importante en el conocimiento, transmisión y defensa de la fe.

¡Vamos a Río!

Nuestra Iglesia es joven. Lo demuestran los millones de jovenes que estarán junto al Papa en Río de Janeiro.

jueves, 26 de enero de 2012

Crónica de una semana inolvidable

Una joya para alentar nuestra fe. ¡No podemos dejar de verlo!



"La magnífica experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud, en Madrid, ha sido también una medicina contra el cansancio de creer. Ha sido una nueva evangelización vivida. Cada vez con más claridad se perfila en las Jornadas Mundiales de la Juventud un modo nuevo, rejuvenecido, de ser cristiano, que quisiera intentar caracterizar en cinco puntos:"
(BENEDICTO XVI, Discurso a la Curia Romana con motivo de las felicitaciones de Navidad)

1. Primero, hay una nueva experiencia de la catolicidad, la universalidad de la Iglesia.
2. De aquí nace después un modo nuevo de vivir el ser hombres, el ser cristianos.
3. Un tercer elemento, que de manera cada vez más natural y central forma parte de las Jornadas Mundiales de la Juventud, y de la espiritualidad que proviene de ellas, es la adoración.
4. Otro elemento importante de las Jornadas Mundiales de la Juventud es la presencia del Sacramento de la Penitencia que, de modo cada vez más natural, forma parte del conjunto.
5. Finalmente, como última característica que no hay que descuidar en la espiritualidad de las Jornadas Mundiales de la Juventud, quisiera mencionar la alegría.

(Ver discurso completo aquí)

martes, 10 de enero de 2012

¿Estaba Jesús soltero, casado o viudo?

Jesús vivió soltero toda su vida.

Ciertamente, la Sagrada Escritura no nos lo dice explícitamente, pero tampoco nos habla de “su mujer” o de “su esposa”.  En cambio, sí nos habla de “su Madre” y de “sus hermanos” (por ejemplo, Cfr. Mc 6,3); los Evangelios nos dicen que Jesús era “el hijo de José”, “el hijo del carpintero” (Cfr. por ejemplo: Jn 2,45; 6,42). Por supuesto, la Biblia tampoco nos habla de “los hijos del Señor”. 

Por tanto, si en ella leemos datos acerca de los padres y de los hermanos de Jesús, ¿por qué no leemos nada acerca de su esposa y de sus hijos?  Es evidente que no había tal esposa ni tales hijos de los cuales hablar.  Luego, Jesús vivió siempre soltero, en esa condición del hombre célibe que se entrega enteramente al cumplimiento de la voluntad del Padre (hoy día se cuenta con documentación que demuestra que ya en el siglo I se vivía el celibato entre los judíos.  Un ejemplo lo constituyen los esenios,  también algunos de  Qumran, y en la tradición de Israel, Jeremías, Moisés y el mismo predecesor del Señor: Juan Bautista).

Alguien podría pensar que quienes escribieron los Evangelios quisieron silenciar una situación comprometedora.  A esta objeción respondemos que en la mentalidad del pueblo de Israel, estar casado era lo más normal y con mayor razón si se trataba de un rabino (que así consideraban a Jesús).  Lo que no era normal era no casarse; y no tener descendencia era algo que consideraban un oprobio, algo vergonzoso (Cfr. Lc 1,25).  Por eso, hablar de un Jesús “no casado” constituía, más bien, en aquel momento, una situación comprometedora.  Sin embargo, los evangelistas no callaron esta realidad.

Frente a quienes sostienen que Jesús estuvo casado con María Magdalena y que de ella tuvo descendencia, afirmamos que se basan en documentos no históricos escritos muchos años después de los  Evangelios canónicos (Mateo, Lucas, Marcos y Juan) por sectas gnósticas alejadas del verdadero cristianismo.

Jesús, pues, vivió célibe, y con su ejemplo inauguró un nuevo estilo de vida que tantos hombres y mujeres han abrazado en el mundo entero a lo largo de la historia, a través de la "virginidad por el Reino de los cielos" (Cfr. Mt 19,12).

Marvin Mundo